Cada vez que puedo trato de transmitirles a mis estudiantes de Informática Educativa de la Universidad San Sebastián, de Santiago de Chile, que los cambios que está provocando en educación el amplio acceso a las redes que tienen nuestros estudiantes está, en cierto modo, rompiendo la antigua jerarquía que existía entre docente y estudiante. En efecto, hoy estamos en presencia de un sistema más colaborativo, donde es fundamental ayudar a los estudiantes a que aprendan a trabajar en equipo -ya que es una de las habilidades claves en la nueva sociedad- y autosupervisarse en dicho trabajo. No olvidemos que Toda organización es más eficaz a través del aprendizaje social en red (Farnos).
La escuela, como centro exclusivo de conocimiento escolar está quedando de lado y, en cierto modo, eso tenemos que aplaudirlo, aunque obviamente eso implica apropiarnos de los nuevos paradigmas, de las nuevas formas de aprender, para así ser eficaces con las nuevas formas de enseñar.