La espada y el canelo, de Alejandro Magnet

En el último tiempo, he leído y disfrutado bastantes obras literarias que nos hablan del apasionante periodo de la Guerra de Arauco, durante la colonia. De esa manera he podido, a través de la ficción literaria, ir interiorizándome de ese impresionante periodo histórico, tan poco desarrollado en nuestras aulas y que, por ende, nuestros estudiantes poco conocen.

La espada y el canelo, una novela publicada en 1958 inicia su relato en 1599, en algún fuerte español del sur de Chile  que se encuentra asediado por las tropas mapuches dirigidas por el toqui Pelantaro.

Novela inteligente, bien desarrollada, con un sólido fondo histórico en que se mezclan personajes reales y ficticios pero, sobre todo, que es capaz de dar cuenta del ambiente bélico de aquel periodo en pleno levantamiento mapuche, luego de 15 años de tregua.

El relato, que se centra en las vicisitudes que vive Rodrigo Fernández, hijo del capitán español a cargo del fuerte, don Manuel Fernández, nos entrega una vívida descripción del peligroso ambiente de la época. Por sus páginas podemos conocer del valor de los españoles que luchan convencidos de su lealtad al rey y a su fe, pero que se encuentran ante un imposible enfrentamiento con los mapuches que, día a día, van recuperando su territorio. Las malas decisiones de las autoridades del Reino de Chile, los malos tratos de los encomenderos a los indios y sobre todo la codicia de muchos soldados españoles que, a estas alturas de la Guerra de Arauco, no son más que lo peor que va quedando en el Virreinato del Perú, nos transmiten el duro ambiente que debieron enfrentar los colonos españoles en la época.

Punto aparte merece la descripción de los mapuches: bravos, altivos, honorables, justos y sobre todo, brillantes estrategas, los mapuches son una fuerza capaz de desafiar e imponerse al ejército más fuerte y victorioso de su época. Pero no se crea que las pasiones humanas no aparecen en las huestes indígeneas. Muy por el contrario, el gran Pelantaro presenta momentos de ira, de embriaguez, de ternura, lealtad e, incluso, de distancia con alguno de los otros jefes mapuches, como Anganamón, por ejemplo.

Novela interesante, atrapante y destacable. En Chile tiene muchas ediciones por la antigua Editorial del Pacífico y la muy actual Editora Zig Zag. Si la encuentran, no duden en adquirirla.

prof. Benedicto González Vargas