sábado, 30 de julio de 2016

Ley de etiquetado de alimentos, un aporte que debe consolidarse

Desde hace pocos días empezó a regir la Ley de Etiquetado de Alimentos que, entre otras cosas, impide que se vendan productos no saludables en los casinos y kioskos escolares. 

Para apoyar esta iniciativa, el Ministerio de Salud (Minsal) elaboró una guía que orienta sobre la alimentación saludable (si desea verla, descárguela acá). que sugiere preferir alimentos naturales como lácteos, frutas, frutos secos y evitar la sal, el azúcar y las grasas saturadas, tan comunes en las colaciones escolares. La guía mencionada incluye un interesante e ilustrativo "menú" semanal.

jueves, 28 de julio de 2016

Martín y yo, de Luis Célèry Fernández

Pocas veces se tiene la oportunidad de comentar un libro cuyo acceso es restringido, casi íntimo, porque la intencionalidad última de su escritura no es constituirse en un ejercicio literario o en un documento histórico, sino que instalarse en la memoria afectiva de un núcleo familiar, dando testimonio de un amor entrañable y de una pérdida inconmensurable. De hecho, he tenido dudas al escribir este artículo, respecto de si no estaré rompiendo, sin pretenderlo, una intimidad que no tengo derecho a penetrar, pero a la vez, la gentileza tenida conmigo al ser uno de los receptores del texto y, sobre todo, la profunda conmoción vital que dicha lectura me generó, espero que sirvan como excusa para esta intromisión y para este comentario.

domingo, 24 de julio de 2016

En defensa de la universidad pública y su historia

Leo en El Mercurio este interesante artículo del destacado académico José Jaquín Brunner, relativo a la creación y evolución de las universidades públicas y su esfera de influencia y desarrollo en nuestro país, por su interés, procedo a publicarlo in extenso.

sábado, 23 de julio de 2016

Sobre las técnicas de investigación cuantitativa

Buscando entre mis documentos y recortes (que son tantos, que a veces esperan años para ser leídos), encontré esta breve e interesante entrevista al académico argentino Marcelo Nazareno, en la que se refiere a las técnicas de investigación cuantitativa, un tema siempre interesante, que corresponde a una cátedra obligatoria en diversas carreras universitarias.

Antes de pasar a la entrevista, creo importante destacar que el Dr. Nazareno es Licenciado en Historia (UNC), Magister en Administración Pública (UNC), Doctor en Ciencias Sociales (Flacso) y autor de varios libros y capítulos de libros sobre ciencias políticas. Vale decir, un académico muy preparado y que sabe muy bien de lo que habla. Pasemos a la entrevista publicada originalmente en Ñ, del Diario Clarín. La reproduzco in extenso:

jueves, 21 de julio de 2016

Cómo estimular la lectura en los niños

Como profesor de Lengua y Literatura, siempre estoy muy cerca de los libros. Leo muchos libros, hago leer libros y busco incentivar la lectura, permanentemente. No obstante, cada vez es más evidente que nuestros estudiantes leen poco y que el gusto por la lectura está muy, pero muy lejos más atrás que el interés por las pantallas interactivas, por ejemplo.

sábado, 16 de julio de 2016

Jorge Baradit y su último éxito editorial

El pasado día miércoles, el diario chileno La Hora, publicó una interesante entrevista al escritor Jorge Baradit, uno de los talentos actuales de la literatura chilena, especialmente del género de Ciencia Ficción, aunque últimamente ha destacado por dos libros de no ficción, Historia secreta de Chile e Historia secreta de Chile 2, sobre estos éxitos se basa esta entrevista firmada por Ignacio Tobar, por su interés, la reproduzco in extenso.

jueves, 7 de julio de 2016

Recuerdo el día en que dijiste que querías terminar (Ruptura), de Hefu

(de Hefu, Helein González Reinhardt)

Recuerdo el día en que me dijiste que querías terminar. Habían pasado tantos días, tantas semanas y meses. Tantos años. Estabas frente a mí, a mi altura, por una vez en la vida. Nos mirábamos de frente, y tú con tu rostro severo… Dijiste mi nombre, y yo temía lo que iba a seguir después. Tenías una mueca en tu boca, tu boca hermosa. Empezaste a hablar, a explicarlo, evocaste aquellos años, meses, semanas y días. Yo me aferraba a la ilusión, no podía creer lo que estaba pasando. La sangre se me subió hasta la cabeza, me puse roja, mi corazón latía con angustia. Y me aferré, me aferré a tu cuello, te abracé fuerte y no fui capaz de articular palabra. Tú, por primera vez, no respondiste a mi abrazo. Tus brazos colgaban a cada lado de tu cuerpo, y yo incrédula, incrédula insistía en que había un hueco vacío en mi cintura, había un frío, algo faltaba en ese encuentro. Insistía en que esto era incorrecto, irreal, imposible. No quería llorar, pero estaba a punto. Te miré a los ojos con desesperación, tú también parecías estar sufriendo. Te besé con frenesí, tomé tu rostro entre mis manos, te abracé y acerqué todo lo que pude hacia mí. Tú no reaccionabas, más bien intentabas recobrar la distancia. No fui capaz de mirarte a los ojos. Pegué mi mejilla a la tuya y dije “no entiendo”. No entiendo, no entiendo. Decía que no entendía, mientras mi índice se deslizaba por tu cuello, mientras mis lágrimas se deslizaban por mis mejillas y mi pelo. No entiendo, y tomé tu mano. Tu mano tomó la mía, y percibí una fugaz esperanza. No entiendo, y seguía sin ser capaz de mirarte a los ojos. Apoyé mi frente en tu hombro, y empecé a sollozar desconsolada. Tus manos tomaron las mías y me dejaste llorar hasta que terminara. Cuando logré recobrar la compostura, te miré a la cara y seguías con la misma expresión. Nada en ti había cambiado, nada tras tu mirada.