Perlas del pensamiento: Viola van de Wyngard

Nacida durante los nefastos días de la I Guerra Mundial, un día 14 de diciembre de 1915 nació la recordada maestra Viola Sophia van de Wyngard quien pese a las dificultades económicas de la época y a la convulsión que hubo en Chile a mediados y tercio de los 20, recibió una esmerada educación, tanto académica como espiritual, pues su padre fue un iniciado maestro masón. Estudió Filosofía y Literatura en la Universidad de Chile, hizo estudios de Secretariado en la Universidad Católica y más tarde obtuvo la certificación como Samaritana de la Cruz Roja Chilena. Su vocación artística se vio complementada con estudios de piano, canto, guitarra, dibujo y pintura con importantes docentes nacionales.



Participó también de la Asociación Nacional de Centros Femeninos de Gran Logia de Chile en Club de la República. Paralelamente ingresó a la Fraternidad Rosacruz de la corriente de Max Heindel, escuela iniciática en la que llegó hasta los más altos grados hasta los más altos grados y, por si eso no fuera poco, durante su fructífera vida espiritual también ingresó a la Orden Martinista, participando en la Logia Jaime Galté.

Todo ese recorrido por tres de las más grandes órdenes esotéricas mundiales –Masonería, Martinismo y Rosacruz- no podía desembocar en otra cosa, que la creación de la Hermandad Blanca Misionaria de Luz.

Como está definida en su página institucional, la Hermandad Blanca Misionaria de Luz es una escuela de Perfeccionamiento Espiritual, Meditación y Servicio, que desde el 27 de junio de 1962 irradia conocimientos espirituales y esotéricos, formando a miles de personas en las disciplinas espirituales y generando centenares de instructores que luego abrirían también otras escuelas de perfeccionamiento. Es raro encontrar algún maestro o director de este tipo de escuelas que no la haya conocido o que no haya pasado por la Hermandad Blanca.

Viola Sophia fundó también la Alianza Espiritualista Internacional, el 27 de junio de 1969,  ONG reconocida por Naciones Unidas que en su época reunió a todos los grupos espirituales de Chile y del Exterior, siendo pionera en Eventos Internacionales realizados aquí en Chile, con su lema “La Unidad en la Diversidad”.

En la década del 70, participó como invitada permanente en uno de los programas de mayor trayectoria y pionero de las enseñanzas espirituales y esotéricas radiofónicas, como fue Saludando la noche. De Radio Portales, que por aquel tiempo era la estación radial más importante, creíble y con la mayor cantidad de filiales y radios asociadas del país. Conducía dicho programa, que duró más de 20 años al aire, el recordado locutor y actor cómico radioteatral, Patricio Varela. Allí compartió micrófono con otros importantes esoteristas de la época, como el astrólogo Caroli Aparicio, el maestro rosacruz Luis Alberto Rossat, el director del Círculo Aleph, Sergio Valdivia Correa, Virgilio Ruilova  y muchos otros.

Su última magna obra en beneficio de la humanidad fue la creación, el 27 de Junio de 1990, de la Fundación para la Tierra Chile, institución ecológica, incorporada a la Earth Foundation de Estados Unidos.

Reconocida en vida por sus esfuerzos fue galardonada con el Premio Chile por la Paz, premio entregado por la Fundación Paz Mundial, sede chilena. El galardón lo obtuvo en mérito de “Demostrar que la paz es posible, a partir del respeto mutuo de todas las ideas”.

Dos libros editados por Editorial Araucanía recogen su pensamiento: El sendero del servicio y El poder creador del pensamiento.

Acá dejo una pequeña muestra de la profundidad de su pensamiento:

1. Aprende que la forma no es más que el velo que oculta el esplendor de la Divinidad.
2. Todas las cosas cooperan juntas para el bien de quienes aman a Dios.
3. Comprende que la Vida Una compenetra todas las formas, de modo que no existe la muerte ni el sufrimiento, ni la separación.
4. El ser humano es, literalmente, lo que piensa, siendo su carácter la suma total de todos sus pensamientos.
5. El poder creador del pensamiento es el factor más potente y fundamental en la vida humana.
6. La mente es el maestro tejedor tanto de la vestidura interna, el carácter, como de la vestidura externa, las circunstancias.
7. No son los caprichos, ni las fantasías, ni las ambiciones, lo que logramos en forma estable, sino aquello que corresponde al esfuerzo que hagamos, a la voluntad que pongamos y al mérito a que somos acreedores
8. Para educar, se debe tener firmeza, pero sin dureza.
9. Servicio y sacrificio son las claves para llevar adelante el desarrollo de las vidas  que constituyen las formas a través de las cuales se expresa la Divinidad.
10. La inofensividad brota de la verdadera comprensión y control de la personalidad por el alma, la que lleva inevitablemente a la expresión espiritual en la vida diaria. Emana de la capacidad de penetrar en la conciencia y en la comprensión de nuestro hermano, y cuando se ha logrado, todo se perdona y se pone en acción el anhelo de ayudar y auxiliar.
11. Mediante la inofensividad se aprende a neutralizar todas las emanaciones malignas.
12. Hay pensamientos inhibidores y hay pensamientos liberadores. Los inhibidores son los que tienden a construir formas, a limitar y a expresarse en el plano físico, o sea pertenecen a los intereses y deseos de la personalidad. En cambio, los pensamientos liberadores tienden a alejarse de los planos inferiores y conducen a la unión con el alma y con el Cristo.
13. Cultivemos el espíritu de felicidad y gozo y los canales de la vida interna se despejarán, llevando la alegría, la felicidad y la bienaventuranza hacia todo cuanto nos rodea.
14. La muerte no existe. Como bien sabemos, hay una entrada en una vida más plena. Hay liberación de los obstáculos del vehículo carnal.
15. Para los no evolucionados, la muerte es un sueño y un olvido, porque la mente no está bastante despierta para reaccionar y el archivo de la memoria está prácticamente vacío.
16. Las facilidades de los medios de comunicación ponen a todo el mundo en relación con las tragedias, dolores y sufrimientos de sus hermanos a miles de kilómetros de distancia. La situación económica de la época actual ha producido una condición de temor colectivo y cuanto más sensible es la persona, mayor es la reacción a este estado mental.
17. Un conglomerado de sufrimientos y temores de otras personas pueden afectar a una persona.
18. La humanidad tiene una misión divina que debe ser llevada a cabo en aras del amor, por medio de la acción comprensiva, el servicio altruista y la disposición a morir en la batalla.
19. Los errores y desatinos de los siglos, son los errores y desatinos de toda la humanidad. Reconocer esto conducirá a establecer el principio de compartir, tan necesario en la actualidad.
20. No hay problemas ni condiciones que no puedan ser resueltos por la voluntad al bien. La buena voluntad nutre el principio de comprensión. Este espíritu de cooperación es el secreto de todas las correctas relaciones humanas y el enemigo de la rivalidad

prof. Benedicto González Vargas

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