<<El escritor recibió ayer el 29° Premio Revista de Libros por su novela "Clara en la noche, Muriel en la aurora" en una ceremonia presencial en el diario "El Mercurio".
Venía de una familia de médicos y lo suyo era la biología, pero a los 14 años una profesora lo hizo leer "El cantar de Mío Cid", el clásico poema anónimo español. Era un texto denso, pero le generó un efecto intenso: lo fascinó. Tanto que, pocos meses después, Rodrigo Atria escribió dos novelas, casi una detrás de la otra. "Pero en un arrebato romántico juvenil, las quemé", recordó ayer el periodista, escritor y cientista político, quien octuvo el 29° Premio Revista de Libros con su novela "Clara en la noche, Muriel en la aurora".
"La vocación de escribir ha estado siempre en mí", dijo Atria (Santiago, 1952) durante la ceremonia de entrega del galardón, realizada de manera presencial -cumpliendo todas las normas sanitarias- en dependencias de El Mercurio, organizado durante casi tres décadas por El Mercurio y CMPC, a partir de esta versión el certamen literario también cuenta con la participación de la Pontificia Universidad Católica, que apoyó especialmente su internacionalización: el concurso tuvo como primer país invitado a Argentina. Para la versión número 30 la editora de libros de El Mercurio y coordinadora del premio, María Teresa Cárdenas, anunció que se convocará a autores chilenos y peruanos y se premiará el género de memoria y biografías.
"Quiero agradecer a "El Mercurio", la CMPC y la Universidad Católica por permitir que exista este premio. Genera un espacio donde los escritores tenemos la posibilidad de instalar nuestras obras en esta vitrina", añadió Atria, que también es autor de las novelas "La despedida" (1982), "La hija del mercader de Venecia" (1995) y "Coplas de sangre" (1998).
Escogida entre 400 manuscritos por un jurado formado por el crítico mexicano Christopher Domínguez Michael, el escritor Gonzalo Contreras y la académica de la UC Macarena Areco, la novela "Clara en la noche, Muriel en la aurora" relata la relación entre un profesor de agronomía ya jubilado y una botánica francesa que viene a Chile a realizar una exposición de paisajismo y, de fondo, va retratando la sociedad chilena del siglo XX. Como apuntó ayer el director de El Mercurio, Carlos Shaerer, el libro está escrito con "una mágica sencillez que demuestra el oficio del autor". Shaerer añadió: "Queremos agradecerle a Rodrigo por el gesto de confianza de participar en este concurso".
BUENA LECHE
"No cabe duda de que el Premio Revista de Libros se ha posicionado como un referente fundamental al momento de reconocer a las plumas emergentes y consolidadas en los distintos ámbitos de la Literatura", dijo en la ceremonia Luis Felipe Gazitúa, presidente de empresas CMPC, quien valoró la mención a la botánica que incluye la novela de Rodrigo Atria. Y agregó: "La palabra escrita es nuestra garantía de descendencia, en especial me parece cuando algo se expresa en el papel. El papel nos asocia a un pasado vibrante de conocimientos acumulados y de historias narradas. Y también nos asocia con el futuro".
Al rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, también la botánica fue un tema que le llamó la atención. "La pandemia nos ha hecho un poquitito más botánicos de lo que éramos antes, preocupados de las pequeñas o grandes plantas que tenemos en nuestro jardín. Cuidamos la naturaleza de una manera distinta. El libro a uno lo golpea y lo remece desde tantas aristas, que muchas veces uno no está preparado para asumir", dijo Sánchez, y reafirmó el apoyo de la Universidad al Premio: "Este es un camino en el que vamos a seguir avanzando con los años; tenemos muchos lazos con universidades de América Latina y puede resultar extremadamente valioso", dijo.
Y aunque Atria no quiso referirse a su novela premiada -"tiene que navegar por sí misma"-, sí contó lo que llamó un "anexo" al premio: "El día en que se supo del premio empecé a recibir una cantidad de llamadas increíbles. Mi teléfono estuvo sonando dos días completos. Y en estos tiempos de crispación en nuestro país, eso habla de un cierto magma en la sociedad de buena leche, buena onda, afecto y cariño. Eso nos hace falta enormemente en este momento", afirmó.>>
Hasta acá el artículo que nos permite conocer un pco más de este talentoso y ahora, felizmente, más conocido, escritor chileno.
prof. Benedicto González Vargas
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