Termino de leer esta novela vertiginosa e inolvidable y
sólo atino a volver a las primeras páginas, al título, donde el autor, cuando
compré el libro y estreché su mano, escribió: "Dulces pesadillas para
Benedicto!!!..." Lo que en un principio me pareció una
divertida forma de autografiar un libro, ahora que termino de leerlo y quedo
con esa sensación de orfandad literaria que muy pocos libros dejan, vengo a
comprender por qué el simpático de Baradit me escribió aquello a manera de
saludo. Es que esta novela de ciencia ficción es, por sí sola un mundo, un
cosmos, un universo nuevo...y podrido. Pocas veces se pone ante nuestra vista
una novela que proponga la creación de toda una cosmología nueva, donde el
desarrollo tecnológico más avanzado va de la mano de un desarrollo en la
investigación de tipo metafísica que, paradojalmente, en vez de generar
personas mejores, conscientes de su dimensión espiritual, lo que hacen es
seguir con la vieja costumbre humana de buscar el provecho propio aunque para
ello deban pasarle por encima al resto de los mortales. Es un egoísmo intrínseco
que brota de las profundidades del ser y no se detiene ante nada. El objetivo
personal y último, tener éxito, debe buscarse a cualquier costo y no importan
los cadáveres que debamos dejar en el camino.
Por cierto, que los enormes
conocimientos sobre el espíritu, la muerte, la reencarnación, los chakras, las
sephiroth, la kundalini, las experiencias psicotrópicas y un dominio casi
impensable de los distintos tipos de energía, generan una humanidad que tiene
muchas más herramientas para comprender los procesos humanos y para, por otra
parte, desarrollar una tecnología que somos incapaces de imaginar siquiera. Más
aún, no solo en este mundo indescriptible creado por Baradit las personas viven
inmersas en ese egoísmo intrínseco del que les hablé antes, también los seres
más elevados metafísicamente hablando, ángeles, espíritus guardianes y dioses
son tan malvados como los humanos. Tal vez, la única diferencia podría
encontrarse en que si los humanos son inmorales, los espíritus superiores son
francamente amorales y por ello mucho peores aún.
La obra, que hunde sus raíces
en la tradición chamánica latinoamericana, que nos presenta personajes cuyos
nombres aluden a la mitología de nuestros pueblos nos plantea la urgente
necesidad de adoptar prontamente una nueva semántica que nos permita comprender
que un Tangata Manu, un selkman o un Lautaro no son lo que sabíamos que eran,
ni siquiera algo próximo, sino una cosa nueva, distinta, imposible, impensable,
inabarcable e inefable que nos va a proponer una nueva definición que, como
todo en este libro, nos va destilar amargos sabores donde se mezclan la sangre,
la crueldad, el sexo más desquiciado y, como dirían los sommeliers, todo ello
con notas de dulzura y aromas de pureza...
Es cierto, porque la novela tiene
momentos de abrazadora dulzura en los personajes de Gunther y Mariana, cuando
ellos recuerdan lo poco que les queda sus vidas y se permiten espacios para
revivir dos segundos de ternura en medio de la defecada vida que les tocó
vivir.
Ygdrasil, como muchos saben, es un árbol de vida en la mitología
nórdica, de allí los dioses arios obtuvieron las runas. Ygdrasil, en esta
novela, es un árbol espantoso que se nutre de las energías de la Tierra y usa
para ello, en calidad de fusibles, conectores o antenas o lo que fuere, seres
humanos vivos a medias, mutilados, consumidos, mantenidos con vida solo para
que este monstruo biotecnológico pueda existir. Ygdrasil es el secreto y el
símbolo máximo de la maldad y la tarea de Mariana, la heroína de esta novela,
es desactivar su mecanismo digital ingresando en cuerpo y alma a su base de
datos luego de superar todo tipo de pruebas a manera de los héroes antiguos y
cargando a cuestas una tragedia personal y un destino tan ineludible como sus
antecedentes griegos. Mariana es chilena, es una asesina de los bajos fondos,
hija de una perra que era mantenida viva y mutilada solo como objeto sexual por
los traficantes de blancas. Su primer homicidio fue matar a su padre, luego una
interminable secuela de asesinatos hizo que los militares mexicanos la
reclutaran para servir de espía y averiguar sobre qué provocaba raras anomalías
en la esfera terrestre. Mariana, con la promesa de cambiar de vida, acepta una
misión que no podía eludir y cada vez se va metiendo más en un torbellino de maldades,
crueldades y poderes imposibles que la atrapan y la agobian. Mariana, es un
heroina trágica casi a la manera de Edipo, explicar este paralelismo implica
develar el final de la obra, así que los insto a encontrarlo por vuestra propia
cuenta.
La Ciencia Ficción verdadera no es un género para personas de gustos
melosos o pudores literarios, eso ya lo sabemos. Esta obra de Baradit, además,
exige una alta tolerancia a la asquerosidad. No por las descripciones que puede
haber de un gurú maloliente y sucio que se defeca sobre sus acólitos y se orina
mientras concede una entrevista. La asquerosidad mayor es la conducta humana y
las múltiples opciones que tiene para ejercitar su maldad. Tampoco es un género
para creyentes extasiados en el misticismo (a menos que -claro está- sean
capaces de separar lo literario de su propio mundo místico, lo que no es muy
común en la realidad). La sola idea de un Dios agonizante que está tan grave
que ya no se ocupa del mundo puede horrorizar a los lectores más beatos.
Baradit
corre riesgos, nos presenta una novela asombrosa en su creatividad, vertiginosa
en el desarrollo de los acontecimientos, creativa en la cosmovisión que nos
propone, holística en el ensamblaje de conocimientos, ciencias y tradiciones de
diversa índole, brutal en la historia que plantea (tiene una historia, una
trama, digo esto porque hay críticos que han negado que la tenga, críticos
literarios que se marearon en la vertiginosidad de la obra y que acabaron
confundidos negando la trama del relato, repitiendo oquedades como meros chips
de la Ygdrasil). Con esta obra debut, que es parte de una trilogía que ya va en
su segundo ejemplar, Baradit entra con fuerza, prestancia y merecimientos a la
lista de los clásicos.
Atención expertos y amantes de la CF. Si no han leído a
Baradit, ya no son tan expertos. Si no han experimentado la brutalidad
insaciable de su prosa, absténgase de hablar sobre el género, porque no han
cursado aún los últimos niveles para graduarse. "Dulces
pesadillas" eso me escribió el simpático desgraciado de
Baradit y cumplió a cabalidad, yo leo de noche y me mantuvo pegado a su libro
hasta pasadas las tres de la madrugada para en un trío de noches de terror
develarme lo retorcido de su creatividad y talento. Ahora, que empezaré a
buscar Trinidad, que en rigor es la primera parte de la historia, publicada
como tomo segundo, probablemente termine debiéndome muchas horas más de sueño e
inoculándome muchas más pesadillas imposibles.
prof. Benedicto González Vargas
(Gracias por pinchar la publicidad en este blog)
Patricia Amat, dice:
ResponderEliminar20 enero 2009
Querido amigo. Quería comunicarme con usted, porque me encantó su blog, pero no encuentro dirección de mail personal para poder comunicarme con usted. Aprovecho la ocasión para escribir en su blog. En primer lugar presentarme, mi nombre es Patricia Amat encargada de marketing y comunicación de Noguays. Recientemente presentamos a los medios de comunicación junto con la delegada de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la junta de Andalucía Pilar Serrano el portal infantil www.noguays.com. Te envío algunos enlaces de las noticias salidas en prensa: - Diario Sur : http://www.diariosur.es/20081105/sociedad/portal-interactivo-dirigido-ninos-20081105.html - La Opinión : http://www.laopiniondemalaga.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008110500_2_215606__Malaga-Fuera-estereotipos-para-noguay - Fundación Audiovisual de Andalucía: http://www.fundacionava.org/pages/revista.php?id=13018 - Málaga hoy: http://www.malagahoy.es/article/malaga/314957/cinco/protagonistas/con/muchos/valores.html Los Noguays son una serie de dibujos animados que se emiten a través del portal infantil. La web es una aplicación gratuita, accesible y diseñada para TODOS los niños, discapacitados o no. El objetivo del proyecto es buscar estimular una vida autónoma y eliminar las barreras que impiden o dificultan la plena integración social de los niños con alguna discapacidad, ya sea física, mental o de comunicación. Te invitamos a que conozcas la web y veas el primer capítulo de la serie de dibujos animados. Pensamos que es un proyecto muy interesante para todos. Un saludo del equipo Noguays
prof. Benedicto González Vargas, dice:
Eliminar21 enero 2009
Gracias por los enlaces, es una estupenda iniciativa, espero que les vaya muy bien, porque ello significará que muchos niños serán beneficiados. Con afecto, Benedicto Andrés