El Diario La Tercera, ha publicado este interesante artículo que
comparto con Uds. por las implicancias pedagógicas y curriculares que
tiene:
Un estudio encargado por el Ministerio de Educación y realizado por el
profesor Dimas Santibáñez, junto a un equipo del Programa Pulso de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile,
arrojó como principales resultados que la educación parvularia estaría
perdiendo el sentido de su misión pedagógica, dada las constantes
presiones que ejerce la rígida educación formal. Por esto, las
educadoras de párvulos se sienten cada vez más presionadas a preparar a
los niños para los niveles básicos, que a centrarse en los procesos de
aprendizaje integrales propios de esta etapa de la vida.
"No existe unidad de sentido -consenso y claridad- en torno a la misión
pedagógica de la educación de párvulos y su aporte al proceso de
formación inicial de los niños y niñas en sus primeras etapas de
desarrollo".
Este fue uno
de los principales y preocupantes resultados del estudio sobre
requerimientos técnicos pedagógicos de las educadoras de párvulos, en el
marco de la Ley Subvención Escolar Preferencial (SEP).
Esta duda en torno a la real función pedagógica de la educación de
párvulos, provendría de muchos factores, entre ellos, del
desconocimiento de las bases curriculares de la Educación de Párvulos, del prejuicio en torno a las profesionales y a este tipo
de educación inicial, y de manera primordial, a las exigencias que cada
vez más hacen de esta etapa, sólo la preparación para los niveles
básicos que le siguen.
CARENCIAS EN EL PROCESO DE INTEGRACIÓN
El estudio fue realizado por el académico del Departamento de
Antropología Dimas Santibáñez, junto a un equipo del Programa Pulso
compuesto por las antropólogas María José Torrejón, Cynthia Meersohn,
Pamela Jorquera, más la antropóloga vinculada Gabriela Egaña. Como
asesora experta en temas educacionales, se contó con el apoyo de la
profesora María Eugenia Parra, docente del Departamento de Educación de
la Facultad.
La investigación fue encargada por la División de Educación Parvularia
del Mineduc, en el marco de la aplicación de la Ley SEP, que entrega una
subvención adicional por los alumnos que son identificados como
prioritarios por sus condiciones socioeconómicas.
Según esta ley, además
de entregar recursos, se exige la suscripción de variados compromisos
por resultados educativos, involucrando en ellos a toda la comunidad
escolar.
Dado este antecedente es que el Ministerio de Educación se propuso -a
través del estudio-, por una parte, conocer las autopercepciones de la
educadoras de párvulos y las evaluaciones formuladas desde los niveles
directivos de los establecimientos educacionales en dos ámbitos: los
requerimientos de estas profesionales en materia de práctica pedagógica,
gestión educacional y curricular; y sus necesidades en materia de
gestión institucional, participación en la comunidad educativa y
vinculación con la comunidad.
"Existía una carencia de información en cómo apoyar a las educadoras
parvularias en el proceso de integración a la educación general. No se
tenía información de qué requerimiento tenían ellas para abordar ese
desafío", explica el Santibañez.
Los investigadores se centraron en 25 establecimientos municipales y
particulares subvencionados de la Región Metropolitana
que poseen convenio para recibir la ley. Además se utilizó la
categorización de escuelas autónomas y emergentes: las primeras han
mostrado sistemáticamente buenos resultados educativos de sus alumnos en
las pruebas Simce; y las segundas no lo han hecho sistemáticamente.
TENDENCIAS ESCOLARIZANTES
Aunque esta investigación no pretende ser representativa a nivel
nacional, sí emergen muchas tendencias que, a juicio de los entendidos
en la materia, se confirman constantemente en el ejercicio profesional
de las educadoras de párvulos.
La principal de ellas es que existiría una profunda tensión entre las
tendencias escolarizantes de la educación formal que tienden hacia la
rigidez e imposición de la norma, y la práctica pedagógica
característica del ethos de la educación parvularia centrada en el
proceso de aprendizaje y en la integralidad.
Esta tensión, que vuelve difusa la misión, sentido y valor de la
educación parvularia, se vería principalmente reflejada en el abandono
de ciertas metodologías de enseñanza propias de la educación inicial,
con las consecuencias que ello trae para los niños.
La integrante del equipo que realizó el proyecto, María José Torrejón,
considera que "se le está pidiendo al kinder
que sea el nuevo primero básico, por lo que la metodología didáctica se
empieza a perder (...) se privilegian los espacios más formales como
mesas, sillas, orden, mirar hacia el frente, etc.".
Las presiones vendrían de los propios establecimientos educaciones, de
las expectativas que poseen los padres, de la sociedad en general y
hasta de las mismas educadoras de párvulos. Para la asesora del
proyecto, María Eugenia Parra, se pierde el sentido de la educación
inicial cuando a ésta se le hacen las mismas exigencias de la educación
formal: "se está pidiendo que la educación parvularia haga un apresto
que debiera ser hecho en la misma educación básica y no parvularia (...)
La educación parvularia no debería perder su identidad, aquella que le
hace proveer de conocimiento a los niños, pero de acuerdo al estado de
desarrollo en que se encuentran".
EXTENDER EL PROCESO DE ARTICULACIÓN
¿Pero cómo superar -por una parte- esta permanente escolarización de la
educación inicial, y por otra, el trauma que podría significar para los
niños pasar de un método de enseñanza integral, a uno prioritariamente
rígido? Los expertos en la materia el proponen un proceso de
articulación más efectivo entre el párvulo y los primeros años de
escolaridad básica.
Para el profesor Dimas Santibáñez, los primeros años de vida son vitales
en el desarrollo de todas las potencialidades de los niños "y la idea fundante de la propuesta pedagógica parvularia, es que esas potencialidades se desarrollan en climas más integrales y tengo la impresión que el desafío es intentar que ese proceso se alargue. Dentro de la
discusión específica en educación, esto se aborda a través de la
temática de la articulación".
"La idea es que el proceso se extienda hasta los primeros meses del
primer año básico, de manera que haya procesos de transición más
suaves", comenta el académico.
Por su parte, la profesora M. Eugenia Parra señala que "se produce
literalmente un trauma, entre los niños que pasan de educación
parvularia a educación básica en el sistema escolarizado, porque se
rompe con el contínuum psicológico del desarrollo humano, que el sistema
escolar actual no estaría considerando".
La académica concluye que la educación básica debiera continuar
metodológicamente con esta forma que se utiliza en la educación
parvularia y en forma paulatina ir produciendo una escolarización, pero
jamás tan rígida como lo es actualmente.
Indudablemente es un tema que debe motivarnos a reflexionar respecto de qué le estamos pidiendo a la educación parvularia como sociedad. He visto a muchos padres aspirar a que sus hijos ingrese a primero básico con la lectoescritura adquirida y esa presión, ejercida sobre la educación Parvularia, me parece, es no solo innecesaria, sino que, además, indebida.
prof. Benedicto González Vargas
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